Para el consultor financiero Omar De Lucca, no es viable la propuesta de entregar la autonomía de la moneda nacional para terminar con la inflación, porque ello implicaría que algún sector invierta miles de millones de dólares. “La gente piensa, voy a ganar en dólares y no voy a tener más inflación, pero eso es un sesgo”, aclaró.
POSADAS. En diálogo con el programa “Somos Identidad” que se emite por MisionesCuatro, el economista y consultor Omar De Lucca analizó la presente crisis económica, con la disparada del dólar libre y el incremento de la inflación, al tiempo que advirtió que hay que ser cuidadosos cuando se discuten propuestas altisonantes pero carentes de sustento, como la dolarización.
Fueron “semanas con mucha turbulencia financiera”, comentó De Lucca, para quien la suba del dólar fue, en parte, a causa de la elevada inflación registrada en marzo. “Al dólar lo podés contraer con oferta / demanda. La inflación no, porque es un juego de expectativas”, argumentó el economista.
Según De Lucca, a la inflación del 7,7% confirmada por el INDEC para marzo, le siguió como por un “efecto dominó”, el aumento en la demanda de dólares libres. Esa inflación “empeoró muchísimas variables de la economía, a los que hay que sumar los rumores del alejamiento del ministro de economía (Sergio Massa), todo ese coctel de información financiera, el mercado lo procesa y lo refleja en cómo ajustó el dólar. La inflación hizo que el dólar trepara casi sin techo, no es bueno para la economía y tampoco para la gente”, subrayó De Lucca.
Por qué es inconsistente la propuesta de la dolarización, que es mal comprendida por buena parte de la población
Asimismo, el consultor insistió en que persiste un “escenario electoral de mucha incertidumbre, más allá de la baja de la candidatura de Alberto y la confirmación de Massa en Economía, junto al avance sigiloso y por momentos ruidoso (del precandidato presidencial de ultraderecha Javier) Milei, (todo esto) hace que la gente se vuelque al dólar”, precisó el economista.
Consultado al respecto de la alternativa de dolarizar la economía argentina que defiende Milei, el economista se mostró escéptico: “Hay que tener cuidado cuando un político que es nuevo, como Milei, que viene de un movimiento que pregona la libertad financiera y estuvo con José Luis Espert, habla de dolarizar”, puntualizó.
“La gente piensa (que con una dolarización), voy a ganar en dólares y no voy a tener más inflación, pero eso es un sesgo. Dolarizar la economía implica tomar una deuda exorbitante en dólares y alguien va a tener que poner miles de millones de dólares en la economía”, advirtió De Lucca. Y agregó: “Es literalmente entregar la autonomía de la moneda nacional a un país como Estados Unidos”.
El problema de las altas tasas de interés como medida para controlar la cotización del dólar libre
“No estoy a favor de dolarizar la economía, pero sí estoy de acuerdo en ir hacia algo más estricto en la contracción monetaria y transformar el déficit en superávit fiscal”, planteó De Lucca. “La inflación no se resuelve de un día para el otro, ni en uno, dos o tres años. Argentina históricamente es un país de alta inflación por malas políticas monetarias, es un fenómeno monetario y no otra cosa”, analizó De Lucca.
En este sentido, De Lucca puso de relieve que “la última medida del BCRA de ajustar la tasa al 81% anual”, no colmó las expectativas del mercado. “Es importante mirar la inflación des-estacionalizada, si mirás un dato estacional como marzo, y lo proyectas, vas a tener una inflación del 150%. Pero eso es un error, porque hubo cosas que aumentaron en marzo que no deberían repetirse los meses siguientes”, precisó el economista.
Con la suba de la tasa de interés al 81%, “el gobierno está apostando a que la inflación en abril toque el 6%. Por eso el ajuste de la tasa de interés dejó gusto a poco en el mercado. Porque fue de 300 puntos básicos y el gobierno estaría esperando que baje la inflación y baje la tasa de interés”, argumentó De Lucca.
Sin embargo, el consultor financiero aclaró que, con una tasa de interés tan alta, “estás matando a las Pymes que no se pueden financiar a estas tasas. Es totalmente nocivo para la economía apostar a una tasa de plazo fijo altísima para favorecer el ‘carry-trade’ (‘transportar y comerciar’) y que los bancos le sigan prestando al BCRA. Los bancos le tienen que prestar a las empresas y a la gente para que puedan salir adelante”, planteó.
La clave del saneamiento de las cuentas públicas y conseguir el superávit fiscal
Para revertir ese proceso devaluatorio e inflacionario, con recesión económica propiciada por las altas tasas de interés bancarias, según De Lucca hay que apuntar al ordenamiento de las cuentas públicas. “En la cabeza de la gente el peso no vale nada y tenemos que pensar en una política estricta de no gastar más dinero del que se recibe, de transformar el déficit en superávit y controlar la caja del Estado y en qué se gasta el dinero. Con superávit, la inflación va a empezar a bajar”, vaticinó.
“Todo el gasto público que hace el gobierno, porque no alcanza con lo que recauda de impuestos, lo financia con emisión. Y eso genera inflación”, remarcó el economista, mostrando lo que considera la raíz del problema de la suba constante de precios. “Si controlas el exceso de planes sociales y de subsidios, la expectativa de inflación va a ir a la baja y el dólar va a ir controlándose. Es entonces en donde el peso empezará a tomar valor”, manifestó.
“Todo empieza por la política monetaria”, remarcó De Lucca, quien insistió en que “el ordenamiento fiscal y del gasto público, es el principal problema del Gobierno”.
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